Aspectos de LUNA y MERCURIO

Aspectos armónicos

Quienes poseen estos aspectos son sociables, comunicativos y receptivos al intercambio. De conversación animada, variada y fluida, tienen un grado de inteligencia emocional. Saben escuchar y asimilan y aprenden con fluidez. La inteligencia es adaptable, receptiva, con sentido común, con facilidad  para ver el punto de vista subjetivo de las situaciones y para cambiar de idea según la circunstancia. No tienen reparo en reproducir ideas o palabras de otros cuando lo consideran enriquecedor en su discurso, aunque a veces se olviden de citar al autor. En cualquier caso, no hablan pretendiendo ser originales sino que más bien se ponen intelectualmente al nivel de la gente común. 

Por eso suele haber una capacidad para la divulgación del conocimiento, el periodismo y la enseñanza infantil. Usualmente hay buena memoria y cultura general. Inclina al estudio de lenguas. Otorga cualidades literarias para el cuento y la novela y especialmente da dotes para el comercio. Sugiere multitud de contactos de tipo comercial o de trato con el público.

Aspectos inarmónicos

En este caso la inteligencia es algo mudable, distraída, dispersa, con frecuentes pequeños fallos de memoria o con dificultades para concentrarse en el estudio. Las ideas, que son un poco erráticas dan muchas vueltas a las cosas. A veces se cambia tanto de tema sin entrar a fondo en ninguno que llega a molestar.

La forma de hablar o la conversación no están exentas de cierta vulgaridad y de tendencia a la indiscreción y a las habladurías, incluso a las pequeñas mentiras (normalmente en cosas que el sujeto considera poco importantes). Aquí no es raro hablar con despreocupación de cosas intimas propias o ajenas que afectan a la popularidad. Hay una propensión a la cháchara insustancial, a hacerse el gracioso o decir cosas tontas. Se ofende con palabras que yerran en entender lo subjetivo de las cosas y los sentimientos personales de los demás.

El sujeto tiene tendencia a ser influido mentalmente por su entorno. Puede cambiar de idea simplemente para caer bien, incluso ser demasiado dependiente de lo que piensa la gente para basar su propio discurso. Puede haber tendencia a repetir como un loro lo que otros han dicho.

Por el contrario, si Mercurio es fuerte y la Luna débil el sujeto tendrá dificultad para hablar con simpatía o comunicarse con fluidez con la gente en general. En este caso los individuos tienen inclinación a desoír a la tradición como fuente de conocimiento, a despreciar las palabras de los que consideran "gente común".