Aspectos de VENUS y JÚPITER

Aspectos armónicos

Este es un aspecto sin duda afortunado que indica una naturaleza amorosa aventurera, con tendencia al gozo, a la satisfacción afectiva, al bienestar y la tranquilidad de espíritu. El individuo es generoso en lo material y también en sus afectos. Tiende a ser fiel, sincero y protector en su forma de amar. Inclina al desarrollo del encanto y alguna forma de gracia que invita a establecer vínculos afectivos buenos y sinceros. Otorga una afectividad expansiva, confianza en el propio atractivo, una cierta benignidad y sentido de la moralidad.

Su filosofía se inclina a la sencillez y la naturalidad con tendencia a ver el lado más amable de las cosas, tiene una disposición pacifica y puede ser feliz con cosas simples, aunque le gusta el lujo y se entrega con prodigalidad al deleite y la buena vida. Otorga cualidades para estudios u ocupaciones relacionados con la macroeconomía, la geografía o las ciencias naturales.

Aspectos inarmónicos 

Parece que este aspecto enfatizara en exceso la bondad natural y la expresión del afecto. Hay cierta fatuidad y se desarrolla un encanto un poco hipócrita. Esta persona tiene algo presuntuoso en lo que respecta a su atractivo. Puede ponerse demasiado el acento en la abundancia, la comodidad, el lujo, hacer ostentación de dinero o bienes o aparentar una solvencia que no siempre se posee. Es típico de personas con tendencia a endeudarse o tener problemas con la ley por mala administración o delitos financieros.

Inclina al hedonismo, a desarrollar una filosofía demasiado acomodaticia, de vida burguesa y excesivamente permisiva en lo tocante a la moralidad. Lleva además, a los excesos en los placeres y especialmente en la mesa y también al gasto excesivo dilapidando el dinero a veces. Pero nunca está contento con lo que tiene. El individuo puede ser acaparador y su énfasis adquisitivo puede llevarle a asumir riesgos económicos confiando demasiado en su buena suerte.

Indica un tipo de persona que se cree más bondadosa de lo que es, aunque también suele ser víctima de individuos que abusan de su bondad mal entendida, quizá por su tendencia a “comprar” a los demás.