Aspectos de MARTE y NEPTUNO

Aspectos armónicos

En estos aspectos existe un temperamento refinado en su forma de actuar, con cierto punto de esmero en el aspecto y la ejecución que puede ser seductor. En esta combinacion se puede encontrar una conexión continua entre la sensibilidad y la percepción sutiles de Neptuno con la acción instantánea y directa de Marte.

De esta manera, la emocionalidad tiende a ser espontánea; se afirma de forma directa y es algo que se defiende con energía. Sin embargo, la persona no gusta de ser violenta, más bien tiene el arte de penetrar las defensas ajenas con delicadeza y sutileza y sabe ganar sin herir la susceptibilidad del vencido, pero eso no significa que no sepa defenderse bien con los sentimientos como arma.

La emotividad tiende a ser activa, incluso vehemente, ya que no es indiferente sino que reacciona y actúa llevado por la compasión y por una percepción sutil e intuitiva de la acción correcta. A menudo hay tendencia a defender y ponerse del lado de los débiles. La compasión tiende a demostrarse con hechos y puede llegar a sacrificarse valientemente.

A veces inclina a cierto fervor religioso o emocional, haciendo a la persona tomar partido decidido por su creencia, por su cultura o nacionalidad, o por alguna causa más o menos humanitaria en las cuales se pone cuerpo y alma. 

Aspectos inarmónicos

Los aspectos de tensión entre Marte y Neptuno ponen en conflicto la acción y la emoción, la actividad y la relajación, el ataque y la huida. Por eso encontramos personas con cierta debilidad para la lucha de cada día y con agresivas reacciones emocionales, sobre todo cuando sobrevienen complicaciones a la hora de actuar en cuyo caso se manifiesta poca paciencia. Estos aspectos pueden inclinar a una exaltación de los sentimientos en general, que puede tomar formas como el fanatismo religioso o los sentimientos nacionalistas, incluso llevando al individuo a cometer actos de violencia. 

Emocionalidad exaltada, agresiones o imprudencias cometidas bajo los efectos de estupefacientes o estados de confusión o cualquier clase de espejismos que falsean la percepción de la realidad. Susceptibilidad, vulnerabilidad, pues siente sus debilidades demasiado expuestas a los ataques.

Esfuerzos infructuosos, tendencia a luchar por causas perdidas o poco prácticas. Conflictos sin sentido. El individuo puede perseguir espejismos con un sentimiento romántico y más bien poco práctico de la existencia.  

Indican tendencias dubitativas o huidizas cuando se trata de enfrentar la acción, desorden o negligencia en la ejecución de las cosas, falta de atención a los propios actos y desinterés propio. El sujeto puede ser depredador y cebarse en las debilidades ajenas. Sin embargo, es muy sensible a los modales de otros y se siente herido en su sensibilidad con facilidad, tiende a evitar enseguida a las personas cuando muestran un poco de tosquedad o conflictividad. Por otra parte, a veces huye de las cosas que realmente debería enfrentar. No es raro que haya cierto abandono del aspecto físico.

Falta real de competencia, apariencia falsa de fortaleza. Agresividad oculta, actitud de acecho, tendencia a ocultarse y pasar físicamente desapercibido sobre todo al entrar en acción. Puede inclinarse al engaño o las acciones deshonestas para ganar. Puede que no sea franco y cuando sus intenciones son agresivas aparentar todo lo contrario. Cuando se siente débil recurre al amago en falso para impresionar. Se enemista secretamente y no plantea las cosas directamente. En los peores casos desarrolla una actitud traidora y enredosa con tendencia a atacar al débil.