Aspectos de MARTE y URANO

Aspectos armónicos

Esta combinación simboliza más que ninguna otra la naturaleza de lo nuevo, de lo naciente y actual, de lo que está en la vanguardia y avanzando en primera línea. De esta forma el temperamento se ve marcado de esta cualidad en mayor o menor medida. Inclina a enfrentar con decisión y valor lo que el futuro pueda deparar, a buscar caminos no trillados para abordar las cosas. No le detendrán los contratiempos o la incertidumbre.

Es indicativo de un temperamento con un grado de alerta, fuerza nervioso-motora y rapidez de reflejos. Tiende a afirmar con energía su libertad e independencia de acción que puede ejecutarse con un punto de originalidad. Se mueve bien improvisando en la acción, pero prefiere desarrollar su capacidad de planear y proyectar con antelación sus actos. Inclina a poner ingenio al servicio de la acción, a la aplicación de técnicas modernas para afrontar los retos y a un sentido estratégico que utiliza el factor sorpresa.

Inclina obrar de acuerdo a los dictados de la razón, de forma civilizada. La persona puede defenderse bien con las armas de la lógica. Se inclina a la cooperación y tiene sentido del compañerismo, aunque tiende a encontrar su propia línea de avance.

Aspectos inarmónicos

En las relaciones inarmónicas entre estos dos astros está simbolizado un temperamento hipertenso, excitable, arisco, de acción algo brusca, con giros repentinos. Se encoleriza ante las contrariedades y tiene un genio variable e inestable en el que resulta difícil predecir qué va a hacer o cuándo va a atacar. Existe la propensión a tomar iniciativas anárquicas y aventuradas al azar, a improvisar en exceso y a actuar con cierto descontrol. En los peores casos conduce a patologías mentales violentas. 

En el sujeto suele haber rebeldía, una inclinación a actuar muy de por libre y a veces sin consideración de la libertad ajena. También una reacción rabiosa ante lo que considera una injusticia o ante quien intente forzar o cambiar su forma de hacer las cosas que puede ser excéntrica y muy poco convencional. Hay sin duda impaciencia y la tendencia a querer ver sus proyectos realizados de inmediato. 

Su lógica siempre tiene que vencer, aunque a veces obra en extraña contradicción con sus propias razones. Tiende a contestar y llevar la contraria y quiere cambiar todo menos a sí mismo. A menudo es incapaz de colaborar sin que medie conflicto. Es propenso a romper la baraja y a enemistarse súbitamente. Lleva al estrés y la sobrecarga  nerviosa.